MERCADO DEL CAFÉ

En 2024, el mercado global del café sigue imparable, con el consumo mundial cerca de los 180 millones de sacos de 60 kg.

Desde el espresso de media tarde hasta el café helado con nombre impronunciable, el mundo no parece poder vivir sin su dosis diaria.

Y no es solo el efecto despertador: muchos también se aferran a sus beneficios potenciales, como los relacionados con la salud. Así que sí, el café es una de las estrellas del mercado global, y parece que llegó para quedarse en nuestras vidas.

Producción Global de Café

Para llenar todas esas tazas, el mundo está produciendo café como nunca. En la última campaña 2023/24, la producción global superó los 170 millones de sacos de 60 kg.

¿Y quién está detrás de todo este esfuerzo?

Principalmente América del Sur, que no se anda con rodeos: solo Brasil aporta cerca de 89.5 millones de sacos, con sus dos millones de hectáreas de cultivos dedicadas al café. Brasil no solo produce, también exporta como si no hubiera un mañana, consolidándose como el gigante cafetero que los demás productores miran de reojo.

Consumo y Principales Mercados

Brasil podrá producir toneladas de café, pero el que realmente rompe la banca es Estados Unidos.

En 2023, los estadounidenses generaron más de 10,500 millones de dólares en ventas de café, mientras que Brasil quedó relegado al tercer puesto con 7,223 millones.

Y claro, no es sorpresa si pensamos en el frenesí cafetero de EE. UU., donde Starbucks y otras cafeterías se encuentran casi tan seguido como señales de alto. Además, Estados Unidos no solo bebe café, ¡lo importa como si no hubiera mañana! Porque, pase lo que pase, ellos se aseguran de que nunca falte una taza lista para cada momento del día.

Para 2024, aunque aún no se dispone de cifras definitivas, se anticipa que estas tendencias se mantendrán, con Estados Unidos, Alemania y Brasil ocupando las primeras posiciones en ingresos por ventas de café.

Tendencias Actuales en el Mercado del Café

Una de las tendencias que pisan fuerte ahora mismo es la de los cafés de comercio justo y orgánicos, porque, claro, ya no basta con que el café sepa bien; ahora queremos que venga con conciencia.

Los consumidores buscan algo más que sabor en cada taza: quieren opciones éticas y sostenibles. Aquí es donde entran certificaciones como UTZ y Rainforest Alliance, esos sellos que garantizan que el café viene de manos que cuidan el planeta. Curiosamente, el 80% de la producción certificada es de la variedad Arábica, que es conocida por su sabor suave y aroma delicado. Es como la “estrella de cine” de los cafés.

Por otro lado, los cafés de especialidad están tomando el protagonismo a lo grande. Ya no se trata solo de llenarnos de cafeína para aguantar el día; el público quiere conocer las historias detrás de cada grano. Esto empuja a los productores a esmerarse en el cultivo y el tostado.

Estas tendencias son una prueba de que el café ha evolucionado. El consumidor moderno no se conforma con que el café sepa bien; también quiere que haga el bien, apoyando a su origen, al medioambiente y a quienes lo cultivan.