De’Longhi Rivelia: Review y opinión tras probarla
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A menudo los detalles más simples marcan una gran diferencia. Es lo primero que he pensado al probar esta cafetera superautomática.
El fabricante lo llama «Bean Switch»… yo lo llamo la solución definitiva para evitar las peleas en casa por culpa del café.
Pero eso no es lo único que hay que mencionar de la De’Longhi Rivelia, hay detalles que me han gustado, otros que no tanto, pero para decidir si esta cafetera va a ser tu nueva acompañante por las mañanas, debes ser tú quién decida si estos detalles son importantes o no.
Índice de contenidos
Principales características
Confieso que mi primer pensamiento al leer sobre la Rivelia fue algo así como: «¿De’Longhi acaba de inventar la máquina de café definitiva y resolver el eterno dilema del descafeinado?».
Suena ambicioso, ¿verdad?
Pues, tras tres semanas poniéndola a prueba, debo admitir que… quizá sí lo hicieron (con matices, por supuesto). Y eso que soy escéptico profesional de las promesas de marketing.
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Nuestro análisis de la De´Longhi Rivelia
Si estás buscando una máquina todo en uno que haga café con leche, cappuccino, espresso, americano y hasta bebidas frías (sí, frappuccinos incluidos) con solo seleccionar una opción en pantalla, presta atención.
Además, si eres de los que pasan del café con cafeína al descafeinado en un mismo día, sin perder un minuto, esta máquina parece hecha a medida para ti.
Dimensiones, materiales y Acabado
Antes de recibir la cafetera estuve revisando sus características, y la verdad es que había imaginado que era un modelo grande, y esta ha sido la primera sorpresa. Está muy bien optimizada y ocupa poco comparado con otros modelos que he probado, a pesar de que sus depósitos están en la media.
El depósito de agua se extrae inclinándolo hacia la derecha, por lo que necesitas suficiente espacio hacia ese lado (olvídate de ponerla a la izquierda de una pared. También tienes que dejar libre la parte superior si piensas usar el sistema de intercambio de depósitos de grano.
Está hecha principalmente de plástico mate. Ligero, sí. ¿Sólido? Bueno, pongamos que cumple su función, aunque algunos detalles podrían mejorar. En su defensa, es plástico del bueno, de ese que no chirría a cada toque.
El ruido es normal, unos 60-70 dB, aunque al moler puede sonar algo diferente debido al diseño desmontable del recipiente. Nada preocupante, pero notarás la diferencia.
Panel de Control
Desde el momento en que la enciendes por primera vez, esta superautomática te guía paso a paso, tanto en la configuración inicial como en la preparación de cada bebida.
Todo está diseñado para que el proceso sea lo más sencillo y agradable posible, si usas un buen grano vas a hacer un buen café, incluso si no has preparado esta bebida en tu vida.
Menús claros y ajustes personalizables
El menú de configuración es fácil de navegar, con opciones que realmente importan: apagado automático (de 15 minutos a 3 horas), ajuste de la dureza del agua, temperatura de extracción, limpieza automática de la jarra de leche…
Todo está claramente etiquetado y a un deslizamiento de dedo. En pocas palabras, no necesitas un doctorado en tecnología para manejarla.
Perfiles de usuario
Permite almacenar las preferencias en 4 perfiles de usuario y esto está genial si sois varios cafeteros frecuentes en casa, porque cada uno puede personalizar su café (más o menos intensidad, cantidad de café o leche…). Incluso aprende rutinas para adaptarse a tus preferencias a lo largo del día.
Una variedad para todos los gustos
La Rivelia ofrece hasta 16 opciones de café One Touch, divididas en dos categorías principales: cafés solos y cafés con leche. Desde un espresso clásico hasta un flat white o un latte macchiato, hay algo para cada estado de ánimo y cada invitado. Además, incluye una opción de leche caliente para chocolate o incluso para tus cereales del desayuno.
- Cafés solos: Espresso, Americano, Lungo, Doble Espresso, y más.
- Cafés con leche: Latte macchiato, cortado, capuchino, flat white… hasta capuchino mixto, por si te sientes creativo.
La única pega podría ser las opciones “frías”, ya que aunque indican añadir hielo, el café en sí no se enfría realmente. Así que, si buscas una bebida helada, tal vez sea mejor preparar un café y enfriarlo en una licuadora con hielo.
Sistema Bean Switch: Cambio de granos al instante…o casi
Cambiar entre diferentes tipos de café siempre ha sido un lío. Algunas marcas han intentado solucionarlo con máquinas de doble molinillo, pero son caras y no aptas para todos los bolsillos. Otras, como Melitta, han dividido una tolva en dos mitades… con resultados que podríamos calificar de «útiles como un paraguas en un huracán». Lo siento, Melitta, pero tu estrategia no convence.
De’Longhi, sin embargo, ha ido un paso más allá con un sistema que no solo permite alternar entre granos, sino hacerlo sin perder calidad.
Además, han añadido un modo de purga para evitar que los restos de café anterior contaminen el nuevo.
Esto significa que puedes preparar un café con cafeína y, minutos después, un descafeinado, todo con una facilidad que casi parece magia. Con este sistema puedes alternar entre dos tipos de grano en cuestión de segundos, sin tener que vaciar el depósito.
¿Cómo funciona el Bean Switch?
Cambiar los granos es muy sencillo. Activas el modo “Cambio de granos” en la pantalla táctil y eliges entre dos opciones:
- «Elige la bebida»: Aquí aprovechas los granos que ya están en el molinillo para hacer una última taza antes de cambiar. Perfecto si quieres un café “de transición” y no desperdiciar nada.
- «Muele & Vacía»: Esta opción muele los restos y despeja el molinillo, dejando el camino libre para el nuevo tipo de café. Ideal para los que no quieren mezclar ni un gramo de un grano con otro.
Ejemplo práctico: El invitado del descafeinado
Supongamos que tienes tus granos de cafeína habituales en la máquina, pero llega un amigo que solo toma descafeinado. Sacas el descafeinado y lo cargas en la tolva de repuesto. Giras la tolva en uso a la posición de desbloqueo, seleccionas moler y purgar, y luego instalas la tolva con el descafeinado.
En cuestión de minutos, tu invitado tiene su café listo, y tú no has tenido que ensuciar nada ni sacrificar calidad. ¿Qué te parece?
¿El sistema perfecto? Bueno, con matices.
La idea de una cafetera con doble depósito de café está genial, pero tiene un inconveniente que ya hemos adelantado… y son los 7-8 gramos que quedan dentro del molinillo, si es un buen café de especialidad no vas a querer molerlos y tirarlos.
A ver, no es que sea algo negativo, más bien es una limitación. La cafetera te da dos opciones; molerlo y desecharlo o hacer un expreso… tu decides.
Preparación del café
Tengo que reconocer que me lo he pasado genial jugando con la configuración y preparando diferentes cafés.
Pero también debo advertir de algo: La pantalla y los controles táctiles están en la parte superior. Si no alcanzas fácilmente, puede ser un pequeño inconveniente, especialmente si tu cocina tiene superficies altas (y eres bajito como yo). Asegúrate de colocarla a una altura cómoda para no complicarte la vida cada mañana.
La cafetera tarda unos 30 segundos en calentarse y 35 segundos en preparar un expreso, más o menos en la media de este tipo de máquinas.
Molinillo y ajuste de molienda
La De’Longhi Rivelia se toma en serio eso de que cada café es único. Con su modo «Bean Adapt», puedes afinar la configuración de la máquina según las características de los granos que estés usando. Y no, no necesitas ser un barista profesional para aprovecharlo. Así es cómo funciona:
- Familiarízate con tus granos
Antes de empezar, la máquina te recomienda preparar al menos tres cafés con los mismos granos. Esto permite que la Rivelia ajuste su configuración inicial con una base más precisa. - Responde a unas preguntas clave
La máquina te preguntará:- ¿Es Arábica 100% o una mezcla con Robusta?
- ¿El nivel de tueste? (claro, medio, oscuro o extra oscuro).
- ¿En qué posición está el molinillo configurado?
- Guarda tus granos favoritos
Una vez configurado, puedes guardar los ajustes con un nombre. Así, la próxima vez que uses esos granos, la máquina sabrá exactamente cómo prepararlos. Perfecto para los que tienen su descafeinado nocturno o su mezcla especial de los domingos. - ¿No ha salido perfecto? Refinemos
Si el resultado no te convence del todo, puedes afinar la configuración. La máquina te pedirá que pruebes otra taza y le digas si estaba equilibrada, aguada o demasiado fuerte. Según tu respuesta, ajustará los parámetros automáticamente para que la próxima salga como te gusta.
¿Y qué parámetros adapta? Pues principalmente la temperatura del agua y el nivel de molienda. Pero como el molinillo en este modelo no es automático lo que hace es aconsejarte un grado y pedirte que lo modifiques tu mismo. ¡Cuidado, nunca lo hagas con el molinillo parado, siempre mientras muele! (esto es un consejo no solo para este modelo, sino para todas las superautomáticas).
Ajustes personalizados para afinar aún más
Como puedes ver, esta cafetera te guía para adaptarse a cada grano, pero si quieres afinar un poco más, estos son algunos consejos en base a mi experiencia:
Si tienes granos recién tostados, lo mejor es dejar el molinillo en un ajuste intermedio (nivel 5). Para granos de tueste más claro o ligero, es mejor usar el nivel 3. En el caso del descafeinado, opta por una molienda más fina para evitar que el sabor tire hacia lo ácido.
Cuando ajustes la temperatura, sube al nivel más alto para un expreso caliente y lleno de aroma. En cambio, si vas a preparar un capuchino o un café, una temperatura media funciona mejor para destacar los sabores sin riesgo de quemarlos.
En cuanto a la intensidad, el nivel 4 o 5 es perfecto si te gustan los cafés potentes y con carácter, especialmente para los expresos. Para algo más suave, el nivel 3 es una apuesta segura. Y si usas descafeinado, súbelo a nivel 4 o 5 para que conserve un buen cuerpo y un sabor equilibrado.
Si quieres llevar tu superautomática a otro nivel prueba un café de especialidad.
Granos seleccionados y recién tostado a mano por experto barista, directo de la tostadora a tu casa… vas a hacer que tus visitas se mueran de envidia por tu flamante cafetera… y tu café «nivel dios.».
Hablemos del espresso: ¿cumple las expectativas?
Seamos claros: las superautomáticas no están pensadas para conseguir un espresso perfecto, como el que podrías obtener con una máquina tradicional y un barista experimentado.
Pero el espresso de la Rivelia es sorprendentemente bueno. Consigue un sabor más complejo y una extracción más precisa que otras máquinas automáticas que he probado.
Eso sí, debes probar y pillarle el punto. Si mueles demasiado fino atascas la máquina (te lo digo por experiencia). Pero una vez que encuentras el punto ideal, produce un espresso consistente y con buen cuerpo, ¡claramente por encima de la media!.
Espumador de leche
¿Textura de leche? Sí, produce una microespuma digna de un café de especialidad. Pero, y aquí viene un detalle importante, no esperes leche hirviendo.
La temperatura máxima de la leche asciende a unos 60 °C, ideal si, como yo, prefieres no quemarte la lengua. Si necesitas tu cappuccino al estilo «lava volcánica», quizá esta no sea tu mejor opción.
Sinceramente me ha sorprendido: Produce microespuma real, y estamos hablando de una cafetera superautomática de precio medio.
¿Escéptico? Yo también lo era hasta que lo vi (y probé). He probado con leche de avena, ajustando la textura a «cremosa» y voilà: espuma perfecta para un flat white o un cappuccino.
Evidentemente, si quieres un latte art decente, tendrás que espumar la leche aparte y jugar con tus habilidades de barista amateur.
Lo impresionante es que, a diferencia de otras máquinas automáticas, aquí no sacrificas textura por comodidad. La De’Longhi Rivelia logra un balance ideal: una microespuma consistente y ajustable, algo que rara vez encuentras fuera de una cafetera profesional.
Limpiar la De’Longhi Rivelia: Tan fácil que hasta te guía la máquina
Cuando hablamos de limpiar una cafetera automática, la mayoría de las marcas hacen como quien da indicaciones en carretera: se limitan a señalar el camino en un manual de instrucciones y esperan que no te pierdas.
Pero con la Rivelia, De’Longhi ha dado un paso más, haciéndolo casi infalible, incluso si no tienes ni idea de por dónde empezar.
Símbolos claros: el «lavavajillas sí o no» que necesitabas
Las piezas de la Rivelia vienen con símbolos claros que indican si son aptas para el lavavajillas.
¿No ves el símbolo de «prohibido»? Adelante, al lavavajillas.
Esto elimina cualquier incertidumbre y reduce tus posibilidades de cometer un desastre digno de redes sociales.
Instrucciones guiadas en pantalla
Lo que realmente destaca es la pantalla táctil, que literalmente te lleva de la mano en las tareas de limpieza. Desde enjuagues hasta descalcificaciones, la máquina te explica cada paso.
Detalles que marcan la diferencia
- Depósito de agua: Vale, esto podría haberse diseñado de forma más intuitiva porque tienes que inclinarlo ligeramente hacia la derecha antes de sacarlo por el lateral. Pero, una vez lo tienes fuera, se sostiene por sí solo. Esto hace que manipularlo sea mucho más cómodo que en otras máquinas automáticas.
- Jarrita de leche: Si dejas la jarra conectada demasiado tiempo (porque, admitámoslo, todos nos hemos despistado alguna vez), la máquina te avisa antes de que tengas que enfrentarte a una comuna de hongos.
Algo también muy importante es que el grupo de infusión es extraíble, y es muy sencillo de limpiar bajo el grifo. He probado otras máquinas como la Krups Roma, que no puedes abrir para limpiar y te aseguro que si miras lo que se forma dentro te quitan las ganas de beber café (por muy eficiente que sea el ciclo de limpieza).
De’Longhi Rivelia frente a PrimaDonna Soul y Eletta Explore
Esta cafetera se sitúa en la parte media del catálogo de superautomáticas de De´Longhi. La cuestión es, como siempre, decidir se merece la pena dar el salto a un modelo superior.
Rivelia vs. PrimaDonna Soul
La PrimaDonna Soul es como el abuelo sabio del catálogo de De’Longhi: robusto, lleno de experiencia y con controles electrónicos para absolutamente todo, incluido el molinillo. Un sueño para los obsesionados con ajustar hasta el último detalle de su café.
Pero claro, aquí viene el «pero»: cuesta unos 500 euros más que la Rivelia y, sinceramente, se nota que ya tiene sus años.
Si el dinero y la nostalgia no son un problema para ti, la Soul puede ser tu elección. Si prefieres innovación y un precio más razonable, la Rivelia no te hará arrepentirte.
Rivelia vs. Eletta Explore
La Eletta Explore es ideal si buscas variedad: desde capuchinos clásicos hasta frappés con espuma de leche fría, lo tiene todo. Tiene 50 bebidas automáticas, una tecnología que además prepara café con infusión en frío, dos depósitos de leche que preparan crema de leche en frío o en caliente y conectividad vía App.
¿Dónde gana la Rivelia? En comodidad. Su sistema de tolvas dobles hace que cambiar de granos (descafeinado para las noches, cafeína para las mañanas) sea más fácil que elegir qué ver en Netflix. Si lo que quieres es flexibilidad sin complicaciones, la Rivelia es tu aliada.
En precio, están muy cerca, así que todo se reduce a tus prioridades: si te chifla tener un menú infinito de bebidas, la Eletta Explore es para ti. Pero si quieres practicidad sin renunciar a la calidad, la Rivelia es el claro vencedor.
Mi valoración final
La Rivelia no solo hace buen café; lo hace fácil, rápido y con resultados que te harán replantearte tus visitas a las cafeterías.
Si buscas comodidad, versatilidad y buen sabor, esta máquina tiene todo lo que necesitas. ¿La recomendaría? Totalmente, pero no todo es perfecto, vamos a resumir mis conclusiones.
Lo que me encanta de la Rivelia
- Tolvas dobles y modo de conmutación inteligente
El sistema de tolvas dobles es una solución brillante para quienes alternan entre diferentes tipos de café, como descafeinado y café normal. La posibilidad de purgar los granos antes de cambiar evita mezclas no deseadas (aunque desperdicia granos). - Expreso por encima de la media
Dejando a un lado que estas máquinas nunca van a hacer un expreso real, si comparamos con otras superautomáticas he de decir que ha superado con creces mis espectativas. - Microespuma impresionante
Para los amantes de los lattes y capuchinos, esta máquina es un sueño hecho realidad. La microespuma que produce es sorprendentemente buena para una máquina de este rango de precios. - Facilidad de uso
Desde la configuración inicial hasta las rutinas diarias, la interfaz interactiva es sencilla y te guía paso a paso. No necesitas ser un experto ni leer un manual de 100 páginas para entender cómo funciona. - Versatilidad
Con 16 bebidas de un toque, cubre prácticamente todos los gustos, desde americanos hasta flat whites. Además, permite ajustes como intensidad, cantidad y temperatura para personalizar cada bebida.
Dónde flaquea un poco
- Café caliente, pero leche… no tanto
Para mí, los 60-62 °C a los que sale la leche son perfectos, pero si prefieres que esté casi ardiendo, puede que esto no te convenza. Y sí, tu padre probablemente se quejará de que está «frio». - Filtro anti-cal del depósito de agua
Este filtro se sujeta con la tapa del propio depósito, al abrirla para rellenarlo, el filtro se tambalea y si no tienes cuidado se cae. - Pantalla en la parte superior
Si mides menos de 1,65 la pantalla puede resultarte incómoda porque está arriba (también depende dónde la coloques). - Purga de granos
Al cambiar de tolva quedan granos que debes usar en un expreso o desechar, si no prevés esto puede ser un incordio. - No es para puristas del espresso
Si buscas un espresso idéntico al que te prepara una máquina tradicional con portafiltro, la Rivelia no es la indicada. Vamos, como todas las superautomáticas… pero hay que decirlo.
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