Esta es la proporción de agua y café que debes usar según el método de preparación

¿Café flojo? ¿Demasiado intenso? Antes de echarle la culpa al grano o a la cafetera, revisa lo básico: ¿cuánta agua usaste? ¿Y cuánto café?

Porque sí, el ratio café : agua marca toda la diferencia.

La proporción estándar que recomiendan baristas y la SCA para café filtrado ronda 1:16 o 1:17. O lo que es lo mismo: unos 60 g de café por litro de agua. Pero no todos los métodos son iguales. Aquí te cuento cómo ajustar ese ratio según cómo prepares el café.

Calculadora de proporción agua-café

Con esta calculadora pretendo ponértelo fácil, pero te aconsejo que mires abajo porque hay trucos y consejos de cada método de preparación, y te aseguro que son súper útiles.

Calculadora de Proporción Café‑Agua

Elige si defines agua o café
Método de preparación

¿Por qué es tan clave el ratio café:agua?

Porque es lo que decide si tu café sabe a gloria o a agua con color. Así de simple.

Un ratio 1:15, por ejemplo, significa que usas 1 gramo de café por cada 15 ml de agua. Si bajas a 1:12, la cosa se pone intensa: más cuerpo, más fuerza… y si te pasas, también más amargor.

¿Prefieres algo más suave y clarito? Entonces súbelo a 1:17 o incluso 1:18. Eso sí, si te emocionas con el agua, lo más probable es que acabes tomando un café insípido.

Cada método tiene su punto dulce. Lo importante es encontrar ese equilibrio entre cantidad de café, agua y tiempo de contacto.

Porque no es lo mismo sumergirlo que filtrarlo. Y con un par de gramos arriba o abajo, todo cambia.

Prensa francesa

bajando émbolo de prensa francesa

La prensa francesa trabaja por inmersión total: café molido grueso y agua caliente conviven varios minutos antes de separar con el émbolo. Por eso se usa un ratio bajo, más café por agua. El estándar: 1:15 (20 g de café en 300 ml de agua). El resultado es una taza con cuerpo denso, textura agradable y sabor potente.

¿Te pasas con el agua? Acabas con un café aguado y sin gracia. ¿Te quedas corto? Puedes subir a 1:14 o incluso 1:12 si te va lo intenso. ¿Prefieres algo más suave? Prueba 1:16. Todo depende de tu gusto.

Mide con balanza si puedes; si no, usa dos cucharadas colmadas por 300 ml. Con esa proporción, la prensa saca lo mejor del grano: dulzor, notas achocolatadas y una textura que se queda en boca.

Espresso: el café en su versión más intensa

cafeteras para hacer café express

Aquí no contamos mililitros de agua, sino cuánto café usamos y cuánto líquido obtenemos. Lo normal: 18 g de café molido fino para sacar 36 g de espresso en 25-30 segundos. Ratio 1:2. Compacto, cremoso y fuerte.

¿Lo quieres más corto y concentrado? Ristretto: ratio 1:1.5 (más denso y potente).

¿Más largo y suave? Lungo: 1:2.5 (menos cuerpo, más claridad aromática).

Cada barista tiene su truco, pero el 1:2 es el equilibrio clásico.

Importante: siempre mide el espresso por el peso del líquido que sale, no por el agua que entra. Y ojo con la molienda y el tiempo: todo afecta.

En casa, si no tienes báscula, prueba con 3–4 cucharadas rasas de café para un espresso doble (~60 ml). Es la forma más concentrada de café que puedes preparar… y para muchos, la mejor.

V60: café limpio y brillante al milímetro

Prueba Cafés MyWay de la cafetera V60

El V60 es el rey del filtro manual. Agua caliente que cae en espiral sobre café molido medio-fino, todo filtrado por gravedad.

Resultado: una taza limpia, aromática y con mucha claridad de sabores.

¿La clave? La proporción. El rango ideal está entre 1:15 y 1:17. Por ejemplo, 16 g de café por 250 ml de agua (1:16) suele ser el punto dulce: buen cuerpo, acidez balanceada y notas bien definidas.

¿Te queda muy fuerte? Prueba 1:17. ¿Muy flojo? Baja a 1:15. Si pasas de café (ej. 1:14), puede salir amargo. Si te pasas de agua (1:18), lo diluyes en exceso.

💡Consejo práctico: dos cucharadas colmadas por taza grande te acercan bastante. Y no olvides lo básico: enjuaga el filtro, haz bloom y ajusta el vertido. El V60 premia los detalles, pero también te deja jugar. Afina tu ratio y cada taza contará su propia historia.

Chemex: claridad total con estilo

Barista usando cafetera Chemex

La Chemex no solo es bonita; también prepara una de las tazas más limpias que puedes conseguir. ¿El truco? Su filtro grueso que retiene sedimentos y aceites. El resultado: café claro, brillante y sin rastro de amargor.

El ratio ideal ronda 1:16 (por ejemplo, 30 g de café medio-grueso en 500 ml de agua). Si lo sientes flojo, puedes ir a 1:15. ¿Buscas algo más potente? Algunos se lanzan hasta 1:14 o incluso 1:12, aunque ahí ya estás entrando en terreno concentrado.

¿Mucha claridad y poco cuerpo? Sube la dosis. ¿Demasiado intenso? Ajusta con agua o baja el café. Para una Chemex de 6 tazas (~900 ml), usa 55–60 g de café y listo.

Muele un poco más grueso que para V60 y vierte el agua en pulsos. Con el ratio justo, la Chemex te da una taza elegante, suave, sin sedimentos y con todos los matices del café en primer plano.

Aeropress: el método todoterreno

probando Aeropress Go

La Aeropress es como el navaja suiza del café: puedes hacer desde un pseudo-espresso hasta una infusión estilo filtro, todo depende del ratio y la técnica.

¿Un punto de partida?

Ratio 1:15 (ej. 17 g de café por 255 ml de agua). Así obtienes una taza equilibrada, con cuerpo medio y sabores definidos. Pero si te gusta más intensa, baja a 1:14 o incluso 1:10 para un concentrado potente que luego puedes diluir como un americano.

¿La prefieres más ligera? Sube a 1:16 o 1:17. Con Aeropress no hay reglas rígidas, solo rangos recomendados. Usa unas 2 ½ cucharadas colmadas para una taza grande (~250 ml) y ajusta según tu gusto.

Ya sea en modo clásico o invertido, este método te da el control total. Y con el ratio adecuado, puedes conseguir una taza limpia pero con más cuerpo que un V60, ideal para quienes buscan equilibrio sin complicarse.

Moka: intensidad casera sin complicaciones

La moka (la de toda la vida en la estufa) funciona con presión suave: el agua hierve, sube y atraviesa el café en el filtro. El resultado: un café corto, potente, algo entre espresso y filtro.

¿La proporción?

Está casi prediseñada: llenas el depósito hasta la válvula y el cacillo con café molido medio, sin prensar. Eso suele dar un ratio cercano a 1:10 (por ejemplo, 15 g de café por 150 ml de agua en una moka de 3 tazas).

Ese ratio es justo lo que hace que salga un café con cuerpo, aromas intensos y un puntito achocolatado. ¿Usas menos café? Te sale aguado y desequilibrado. ¿Te pasas o lo compactas? Riesgo de quemar o bloquear la moka.

Guía casera fácil: 1 cucharada colmada por cada 100 ml de agua. Si la moka es de 4 tazas, unos 30 g de café en total y listo.

¿Te parece fuerte?

Añade un chorrito de agua caliente o leche. ¿Lo quieres más potente? Usa una molienda un pelín más fina, pero sin pasarte. La moka bien hecha es puro carácter… sin crema, pero con mucha personalidad.

Cold Brew: café frío, suave y con fuerza

El cold brew no se hace con calor, sino dejando café molido grueso en agua fría entre 12 y 18 horas. Y como no hay temperatura que ayude a extraer, hay que usar más café para compensar.

La proporción clásica para preparar un concentrado es 1:10 (ej. 100 g de café por 1 litro de agua). Así obtienes un brew fuerte, perfecto para mezclar con hielo, agua o leche. ¿Lo quieres listo para beber sin diluir? Entonces sube a 1:15 (ej. 40 g en 600 ml) y te queda más suave.

¿Te sale muy intenso? Añade agua o leche al gusto. ¿Muy flojo? Baja el ratio a 1:8 y verás cómo sube el cuerpo. Lo bueno del cold brew es que es flexible y muy agradecido: da menos acidez, menos amargor y sabores dulces, achocolatados o a nuez.

Receta básica: café + agua, reposo largo y luego filtras. Puedes guardarlo en la nevera varios días. Solo recuerda: a menor ratio, más intensidad y cafeína; a mayor ratio, más ligereza y frescura. Tú decides el punto justo.

Tabla resumen

MétodoProporción estándarEquivalencia casera (aprox.)
Prensa francesa1:15 (1 g de café : 15 ml de agua)~20 g café por 300 ml agua (2 cucharadas por taza)
Espresso1:2 (1 g de café : 2 g* de bebida)~7 g café por 30 ml (1 taza espresso, muy concentrado)
V60 / goteo1:15 – 1:17 (según preferencia)~15 g café por 250 ml agua (2–3 cucharadas por taza)
Chemex1:16 (1 g de café : 16 ml de agua)~30 g café por 500 ml agua (aprox. 1 cda por 150 ml)
Aeropress1:15 (1 g de café : 15 ml de agua)~17 g café por 250 ml agua (2½ cucharadas por taza)
Cafetera moka1:10 (1 g de café : 10 ml de agua)~15 g café por 150 ml** agua (llenar cacillo de moka)
Cold Brew1:10 (concentrado; 1:15 suave)**~50 g café por 500 ml agua (cold brew concentrado)

* En espresso, la proporción se mide en peso de la bebida extraída (no en ml de agua añadida). Un espresso ~30 ml pesa ~30 g, por eso 7 g café → ~30 g espresso = ~1:4 en volumen pero 1:2 en peso.

** El volumen de agua en la moka depende del tamaño de la cafetera (llenar hasta la válvula). Ejemplo: moka 3 tz = ~150 ml, moka 6 tz = ~300 ml.

El ratio lo cambia todo. Empieza con las proporciones recomendadas y ajusta según tu gusto.

¿Te quedó muy fuerte? Añade agua la próxima vez. ¿Muy flojo? Usa más café. La balanza es tu amiga, pero si no tienes, las cucharas también valen.

Lo importante: prueba, ajusta, y disfruta del proceso. Tu taza perfecta está a un par de gramos de distancia.

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