EL PACÍFICO (Descafeinado)
Como el océano que le da nombre, este café invita a la tranquilidad.
Una taza serena, sin sobresaltos ni prisas. Libre de cafeína y de químicos, mantiene intacto su el sabor dulce propios del café brasileño, pero con una suavidad que recuerda al vaivén de las olas.
Si el océano Pacífico pudiera convertirse en café… probablemente sabría así.